Rostock es una ciudad de poco más de
200.000 habitantes ubicada en el estado federado de Mecklenburg-Vorpommern, al norte de Alemania a orillas del mar Báltico.
Es conocida como Ciudad Hanseática de Rostock, por haber formado parte de la
llamada Liga Hanseática de la que os hablaremos al final del artículo.
La ciudad de Rostock nos pareció un tanto
triste si bien lo que más merece la pena es Warnemünde, una pequeña ciudad costera cercana, de la que os hablaremos
al final.
¿Qué ver en Rostock?
Si decidís viajar en tren hasta Rostock, llegaréis a la
estación central, Hauptbahnhof. Debéis coger la calle Rosa-Luxemburg-Straße
que sale frente de la estación y seguirla toda recta hasta que lleguéis al
centro (también se puede ir en tranvía).
Lo primero que os encontraréis será la Steintor (Puerta de Piedra), la puerta más famosa de la antigua muralla de la ciudad, de la cual aún se pueden ver restos.
Lo primero que os encontraréis será la Steintor (Puerta de Piedra), la puerta más famosa de la antigua muralla de la ciudad, de la cual aún se pueden ver restos.
Steintor
Justo a su vera se encuentra la
impresionante Casa de Los Estados (Ständehaus), construida a finales del siglo
XIX. Es fácilmente reconocible puesto que está hecha con ladrillo rojo y aún conserva
la presencia noble de cuando era parlamento de Mecklemburgo, hasta 1918.
Casa de Los Estados
Cruzando la Steintor, veremos la otra
cara de la puerta, que es más bonita que la primera impresión que obtenemos
viniendo de Hauptbahnhof. Siguiendo por esa calle llegaremos a la Plaza del
Mercado Nuevo (Neuer Markt), formada por un conjunto de antiguas casas de los
siglos XV y XVI. Es la plaza principal de la ciudad y en ella se encuentra el
Ayuntamiento (Rathaus), construido en el siglo XIII en estilo gótico báltico
aunque en el año 1729 se le añadió la fachada barroca que se puede ver
actualmente.
Desde Neuer Markt se puede contemplar parcialmente la
impresionante iglesia de Santa María (St. Marien Kirche) la
cual destaca por el contraste de colores con respecto a las casas de la Plaza
del Mercado Nuevo. Se puede entrar gratis en su interior y alberga uno de los
relojes astronómicos más antiguos del norte de Europa.
Plaza de Neuer Markt con la iglesia de Santa María detrás
Tras entrar en su interior, se puede
volver a la plaza y coger la calle comercial de la ciudad, conocida como
Kröpeliner Straße. En ella, además de casas con formas curiosas, podrás
comprar de todo: ropa, souvenirs, etc.
Calle Kröpeliner Straße
Al final de la misma se encuentra la Universitätsplatz (plaza de la universidad). En ella, además de la Universität Rostock, se encuentra la oficina de turismo. Ahí puedes coger un plano de la ciudad gratuitamente para terminar lo que nos queda por ver. Nosotros seguimos un camino recomendado en dicho plano. Este camino nos llevó a la Kröpeliner Tor, al final de la calle de mismo nombre. Se trata de otra de las torres de las fortificaciones del siglo XIII. Está construida con ladrillo rojo gótico y mide 54 metros de altura.
Llegados a este punto, lo mejor es girar
e ir hacia atrás pero rodeando la ciudad, es decir, por el puerto. Hay que
mencionar que en su época fue el principal puerto comercial de la RDA. De
hecho, os habréis podido percatar de que los semáforos de Rostock son los
conocidos Ampelmann de la RDA que se pueden ver en otras ciudades como Berlín o
Dresde.
El agradable paseo por el puerto finaliza
en el edificio de los cruceros AIDA. Justo al lado de ese edificio, ya fuera
del puerto, se encuentra la St. Petri kirche (iglesia de San Pedro). En
ella, además de ver la propia iglesia, podrás subir a la torre de 117 metros
por unas escaleras de caracol o bien por ascensor y ver desde ella toda la
ciudad. Horarios y precios en su página web.
Desde aquí se puede volver a la calle Kröpeliner
Straße para volver a la estación de trenes y buses. Allí hay que coger el S1,
S2 o S3 para llegar a Warnemünde (se tarda 21 minutos).
Warnemünde es un distrito perteneciente a
Rostock de unos 8000 habitantes. El nombre viene del río Warnow, que
recorre el estado federal de Mecklenburg-Vorpommern.
Tiene un aspecto encantador, ya que desde
su fundación en el año 1200, ha sido durante siglos un pequeño pueblo de
pescadores. En 1323 Warnemünde pasó a pertenecer a la ciudad de Rostock.
¿Qué ver en Warnemünde?
Lo mejor que se puede hacer es pasearla.
Según salimos de la estación de trenes llegamos al puente que cruza el famoso
Alter Strom (canal antiguo), un canal que comunica la ciudad con el mar
Báltico. Este puente deja una estampa muy bonita y veréis mucha gente
haciéndose fotos en él.
Alter Strom
Cruzando el puente, hay que girar a la
derecha y recorrer el paseo marítimo, lleno de restaurantes, heladerías, tiendas
de ropa, etc.
Al final de él, llegaréis a la foto
clásica de Warnemünde, su faro (Leuchtturm) de 1897. Si subimos a este faro
(precio 2€, 1€ para estudiantes) podremos ver todo el pueblo gracias a sus 30 metros de altura y carteles que nos
indican lo que hay a cada lado de la ciudad. Además, parece ser que es el faro que ilustra la carátula de la película Shutter Island. Junto a él se encuentra el
sorprendente edificio Teepott, el cual alberga tiendas y bares en su interior.
Faro y edificio Teepott en Warnemünde
Si el tiempo acompaña, lo mejor que
podéis hacer es pasar el día en la playa. Además, en verano, montan castillos
hinchables para los niños.
Playa de Warnemunde vista desde el faro
Podéis recorrer el camino marítimo
paralelo a la playa hasta llegar al Hotel cinco estrellas Neptun, construido en
1971. En él veréis un conjunto de banderas correspondientes a los países que pertenecieron a la Liga Hanseática. Esta fue una organización de comunidades con mutuo apoyo defensivo y comercial en el norte de Alemania fundada en Lübeck en 1158. Esta federación no solo estaba formada por ciudades alemanas, sino que ciudades cercanas al mar Báltico también tomaron parte: ciudades de Polonia, Estonia, Letonia, Lituania, Rusia, Suecia, Noruega, Países Bajos, etc. tal y como podéis comprobar por la cantidad de banderas que hay.
Si venís en un crucero, lo normal es que lleguéis a Warnemünde, por lo que lo si queréis ver Rostock únicamente tenéis que coger el S-Bahn (el tren de cercanías aquí en Alemania) en dirección contraria a como hemos explicado en esta página.
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